banner
Hogar / Blog / Por qué nunca debes deshidratar dientes enteros de ajo fresco
Blog

Por qué nunca debes deshidratar dientes enteros de ajo fresco

Aug 08, 2023Aug 08, 2023

El ajo, con su sabor robusto y picante, es un ingrediente básico en innumerables platos salados. Deshidratar los dientes de ajo te permite concentrar su sabor distintivo, lo que puede amplificar la complejidad de un plato. Deshidratar el ajo también prolonga su vida útil y reduce el desperdicio de alimentos. Cuando se seca y almacena adecuadamente, el ajo deshidratado puede conservarse durante varios años. Aunque esta técnica de conservar y utilizar el ajo puede ser muy útil, también puede resultar más difícil de lo que algunos cocineros caseros podrían imaginar.

Deshidratar dientes de ajo enteros puede resultar complicado debido a su forma y contenido de humedad. Garantizar un secado uniforme es difícil porque la humedad dentro de los dientes puede provocar un secado desigual y un posible deterioro. Esto se debe a la dificultad de saber cuándo se ha secado por completo el centro de los dientes de ajo enteros. En lugar de trabajar con dientes enteros, es mejor cortarlos en rodajas o picarlos antes de deshidratar el ingrediente aromático.

Para lograr los mejores resultados al deshidratar los dientes de ajo, pélelos y córtelos lo más uniformemente posible. Esto permite un secado uniforme y reduce el riesgo de retención de humedad. A continuación, coloca los dientes de ajo rebanados o picados en las bandejas del deshidratador en una sola capa. Pon el deshidratador a temperatura baja y deja que el ajo se deshidrate durante varias horas o hasta que esté completamente seco y quebradizo.

Una vez que los dientes de ajo estén deshidratados, existen muchas formas posibles de utilizarlos. Úselo como ajo en polvo después de molerlo hasta obtener un polvo fino con un molinillo de especias o un mortero. Infunde aceites y úsalos para rociar sobre ensaladas, pastas o carnes a la parrilla para darle un toque adicional de sabor a ajo. En caso de necesidad de ajo fresco, incluso puedes rehidratar los dientes de ajo secos remojándolos en agua tibia o aceite.

Por lo tanto, no temas deshidratar tu propio ajo, especialmente si tienes una cantidad excesiva de dientes a mano. Solo tenga en cuenta que el proceso requerirá un poco más de preparación que simplemente tirarlos al horno o al deshidratador.